Un buen resumen del gris desempeño del Athletic en el Martínez Valero es que procuró un único disparo entre los tres palos y que este llegó, además , en el minuto 91, ahora en el tiempo de añadido de la segunda mitad. Alex Berenguer, un futbolista que tiene el cielo ganado por su implicación, su sacrificio y por jamás levantar la voz, fue el que trató de sobrepasar a Iñaki Peña con un remate desde dentro del área que, en honor a la verdad , tampoco inquietó en demasía al guardameta del Elche. Y de esta forma , con ese pobre bagaje ofensivo y un contrario que remató hasta en cinco oportunidades contra la meta defendida por Unai Simón, que se ganó, sin discusión alguna, la cuenta de mejor jugador del bando rojiblanco, el Athletic consiguió el máximo premio al que aspiró: el empate a cero.









