El Barça se llevó la victoria en Balaídos en un partido frenético que cerró la duodécima jornada de la Liga. El cuadro catalán se impuso en un encuentro caracterizado por el caos y el caos en el que sobresalió el nombre de Robert Lewandowski, que anotó un \'hat-trick\' (2-4). El triplete del polaco y el tanto de Lamine Yamal neutralizaron los goles de Carreira y Borja Iglesias para dar al elenco de Hansi Flick tres puntos vitales en la lucha por el título. El conjunto catalán recorta 2 puntos al Real Madrid y se pone a solo tres de los blancos antes del parón de escojas.

El Rayo Vallecano empató ante el Real Madrid (0-0) en la 12ª jornada de LaLiga. El grupo franjirrojo se queda con 15 puntos tras este empate en el estadio de Vallecas. Un partido muy igualado en el que el Rayo Vallecano plantó cara al líder. El aparato comenzaba con un once formado por : Guerra ; Ratiu, Lejeune, Mendy, Pep Chavarría; Ciss, Unai López, Pedro Díaz, De Frutos, Isi, Álvaro García. Iñigo apostó por una alineación en la que no había un nueve de referencia, intentando encontrar la movilidad en ataque y las transiciones veloces.

Rápida reacción del Barcelona tras la derrota del Clásico. Los de Flick no podía permitirse un tropiezo y salió con actitud perfecta ante el Elche, sin llenar un partido impecable pero resolviéndolo por 3-1. Los tantos de Lamine Yamal, Ferran Torres y Rashford dejaron en susto el de Rafa Mir, que llegó a devolver al Elche al partido después de un rápido doblete azulgrana en poco más de diez minutos. Un Barça implacable había mandado a la lona a un Elche temerario, pero los ochenta minutos posteriores no fueron el festival que se intuía. El Barcelona no llegó a someter a ese Elche intrépido de Eder Sarabia, en especial en un segundo tiempo mucho más templados que el primero.

Real Madrid y FC Barcelona se daban cita este domingo en el primer clásico de la temporada. Eternos rivales frente a frente , primer y segundo clasificado peleando por el liderato de LaLiga, bajo un ámbito extraordinario en el Santiago Bernabéu. Ya en los prolegómenos del acercamiento , multitud de aficionados han recibido al autobús entre cantos , alentando al equipo para el desafío ante los culés.

No hay solamente objetivo en el fútbol que lo que marca un resultado. La victoria son tres puntos, el empate se divide en una unidad para cada aparato y la derrota no tiene ninguna consecuencia a nivel de puntuación. En ocasiones puede ser engañoso. Más que nada , cuando la sensación, en términos generales , es la de que se mereció mucho más de lo logrado. El Levante lo sintió frente al Rayo Vallecano, sufriendo un 0-3 que desestabilizó la armonía y la alegría provocada por la óptima progresión de la plantilla. Hizo falta una reacción, con la capacidad de señalar que, más allá de los tropiezos, el sendero hacia la salvación es el preciso.

Quinto partido consecutivo sin ganar para el Valencia. El Villarreal amplió la crisis del equipo de Mestalla este sábado con los goles de Gerard Moreno, que convirtió el partido desde el punto de penalti en la fiesta de sus 300 encuentros vestido de amarillo, y Santi Comesaña. Los números hablaban de la necesidad de victoria del Valencia y Villarreal. Los blanquinegros, con 2 puntos de doce posibles sumados en los últimos cuatro partidos, y los amarillos, con cuatro partidos sin ganar entre Liga y Champions, necesitaban los tres puntos. Y se los llevó el Villarreal.

Los acordes del himno solamente se escuchaban en mitad de la estruendosa pitada que salía de unas gradas decepcionadas, muy irritantes , por lo recién presenciado. Una reacción extendida comprensible dado el paupérrimo rendimiento del Athletic, si bien la bronca tuviese distintas receptores , entre ellos el árbitro, detalle este que expone hasta qué punto se incrustó en la afición el sentimiento de impotencia generado por el avance del partido. El juez poco o nada tuvo que ver en la derrota, un desenlace propiciado por los méritos del Getafe en la versión más ambiciosa que se le recuerda. La cuadrilla de José Bordalás logró que fuera imposible mencionar en clave positiva siquiera un aspecto del trabajo de los futbolistas de Ernesto Valverde.

Por undécimo partido consecutivo, Mbappé volvió a marcar y le ha vuelto a dar tres puntos al Real Madrid (0-1). Lo hizo en Getafe, ante un aparato muy ordenado que le puso las cosas realmente difíciles , pero que terminó , eso sí, desquiciado y con 2 jugadores expulsados por sendas faltas sin balón a Vinicius Jr. El brasileño no fue titular en un once, nuevamente , lleno de novedades de Xabi Alonso, que presentó un doble pivote formado por Tchouaméni y Camavinga, y apostó por Mastantuono y Rodrygo como escuderos de un Mbappé que llevó riesgo casi en cada acción. Fue de lo poco señalado de un Madrid gris, muy atascado y falto de imaginación en su juego a lo largo de parte importante del encuentro.

Un buen resumen del gris desempeño del Athletic en el Martínez Valero es que procuró un único disparo entre los tres palos y que este llegó, además , en el minuto 91, ahora en el tiempo de añadido de la segunda mitad. Alex Berenguer, un futbolista que tiene el cielo ganado por su implicación, su sacrificio y por jamás levantar la voz, fue el que trató de sobrepasar a Iñaki Peña con un remate desde dentro del área que, en honor a la verdad , tampoco inquietó en demasía al guardameta del Elche. Y de esta forma , con ese pobre bagaje ofensivo y un contrario que remató hasta en cinco oportunidades contra la meta defendida por Unai Simón, que se ganó, sin discusión alguna, la cuenta de mejor jugador del bando rojiblanco, el Athletic consiguió el máximo premio al que aspiró: el empate a cero.